La Patrona de los Bibliotecarios : Santa Wiborada de San Galo

Virgen y Mártir. Santoral 2 de Mayo

El Papa Clemente II en el año 1047, canonizó a Wiborada convirtiéndose en la primera mujer canonizada oficialmente por el Vaticano.

Nacida en el siglo IX en Klingna, Aargau (actual región Suiza) era miembro de la nobleza Suavia. Su hermano Hatto fue sacerdote y presbítero de la iglesia de San Magno. 

Mujer de una profunda Fe, comenzó a escuchar revelaciones divinas, lo que no terminaba de gustar a los sacerdotes locales, convirtiendo su casa en un hospital para la gente pobre que le llevaba su hermano. Siendo casi adulta, viajó a Roma acompañada por su hermano. A su regreso la madre tenía apalabrada una boda que garantizaría su futuro, pero Wiborada tenía otros planes y en el camino de regreso ingresó de prueba en el convento de San Galo. Tras superar tres años de prueba, obtuvo su pase definitivo, y se encerró voluntariamente para rezar y ser penitente en una habitación. 

En el monasterio trabajó como encuadernadora, ocupándose de bordar y ornar las telas destinadas a cubrir los numerosos y suntuosos manuscritos que poseía este monasterio. 
Famosa por su austeridad y su don de profecía anticipo la invasión húngara a la región, lo que permitió salvar la biblioteca (cuyos materiales trasladaron), y a las personas que trabajaban en ella, sin embargo, ella cumplió su promesa y permaneció encerrada en el monasterio. Cuando llegaron los húngaros, nada había en él, salvo esta mujer enclaustrada. Estos haciendo gala de una enorme crueldad, tiraron el tejado de su celda teja a teja, para más tarde rematarla a golpes, así Wiborada murió como mártir. 

Tan pronto como los bárbaros partieron, Wiborada fue encontrada muerta en su celda, destrozada la cabeza por tres golpes de hacha y bañada en sangre. Era el año 926. Su imagen se representa con un manuscrito y un hacha, símbolo de su martirio.-